jueves, 12 de febrero de 2015

LA HIGIENE BUCAL, UNA CUESTIÓN DE SALUD

Los propietarios suelen dar poca importancia y cuidado a la boca de sus mascotas; sin embargo, las enfermedades bucales son los problemas que más suelen afectar a nuestros perros y gatos. Nuestras mascotas padecen enfermedades de la cavidad oral muy parecidas a las nuestras, aunque cuando decidimos tomar medidas el grado de afección suele ser muy alto y el daño bastante extenso. De hecho, la gran mayoría de perros y gatos de más de tres años tienen algún grado enfermedad periodontal que sería necesario solucionar.


La enfermedad periodontal es la más habitual. Para llegar a esta situación es necesario que se deposite placa sobre la superficie de los dientes. La placa dental es una capa que se forma sobre la superficie de los dientes formada por bacterias, componentes de la saliva, detritos orales y células de la mucosa oral. Puede que la placa no sea perceptible visualmente, sin embargo, se produce en poco tiempo. La formación de placa es independiente de los alimentos ingeridos. Un estudio realizado en perros que fueron alimentados por sonda demostró que la placa se produce aunque no exista el paso de los alimentos.

La formación de placa sobre la superficie de los dientes permite que se adhieran bacterias y estas, a su vez, permiten la acumulación de más bacterias. La respuesta a la presencia de bacterias es una reacción inflamatoria en las encías denominada gingivitis. La gingivitis es reversible y desaparece cuando eliminamos la placa dental.

La gingivitis es la lesión inicial de la enfermedad periodontal. Si la gingivitis no se trata puede evolucionar a periodontitis. La periodontitis es una inflamación de las estructuras que mantienen el diente fijado al hueso. Esta inflamación provocará la destrucción del ligamento periodontal y del hueso alveolar. El resultado final es la pérdida de piezas dentales con el consiguiente malestar para el animal y la pérdida de calidad de vida. Por esta razón es imprescindible prevenir la formación de placa y la gingivitis. En la mayoría de las ocasiones, la periodontitis es un proceso irreversible.

Existen evidencias de que una infección en la boca en individuos con periodontitis puede producir enfermedad en otros órganos como el corazón, los riñones, el páncreas, etc. por diseminación bacteriana. La infección de la boca actúa como reservorio de infección para el resto del organismo. Las bacterias presentes pasan a la circulación sanguínea a través de las encías inflamadas y pueden asentarse en otros órganos dañándolos e impidiendo su correcto funcionamiento. 
Para que se desarrolle la enfermedad periodontal deben coincidir varios factores en el animal:

-El animal ha de ser sensible a la evolución de la enfermedad.

-La cavidad oral debe contener microorganismos que refuercen la infección.

-El ambiente de la cavidad oral debe permitir que los microorganismos expresen sus efectos patógenos.

-El patógeno debe estar en cantidad suficiente para producir la evolución de la enfermedad.

Si bien es cierto que no siempre están presentes todos los factores y que no todos los individuos se ven afectados en la misma medida, podemos afirmar que la incidencia es muy alta y esta aumenta con la edad.

La enfermedad periodontal es una de las patologías más frecuentes en los pequeños animales. A pesar de la elevada incidencia, un gran número de mascotas no reciben cuidados dentales a lo largo de su vida. Si hiciéramos una comparación entre los cuidados que reciben nuestras mascota y los que recibimos nosotros mismos, nadie concibe que una persona pudiera estar durante años sin cepillarse los dientes. Sin embargo, la higiene oral de nuestras mascotas es uno de los aspectos más descuidados por parte de los propietarios. Siguiendo con las comparaciones, ¿alguien se imagina dejar sin tratamiento a nuestra mascota si esta tuviera en la piel una herida infectada tan extensa como toda superficie de su boca? Es habitual que los propietarios acudan a nuestra consulta más porque les molesta el olor que despide la boca de su perro que para recibir consejos de cómo prevenir las infecciones bucodentales y la caída de los dientes.

No obstante, prevenir estos problemas es una tarea realmente sencilla. Solo nos llevaría unos minutos al día. La medida preventiva más eficaz y más fácil de implementar es el mantenimiento de la higiene oral. Esta la debe realizar el propietario en casa. El objetivo es eliminar o reducir lo máximo posible la acumulación de placa en las superficies de los dientes, la cual es el inicio de todo el proceso patológico.


La forma más efectiva y sencilla de eliminar la placa dental es mediante el cepillado dental. La pasta dentífrica debe ser específica para perros y gatos. Esta pasta para mascotas no hace falta enjuagarla y los animales se la pueden tragar sin riesgo. La pasta dentífrica para humanos puede resultar tóxica para las mascotas debido al alto contenido en fluor. Lo ideal es cepillarles a diario los dientes, pero si el cepillado es meticuloso bastaría con tres o cuatro veces a la semana. Los días que no les cepillemos los dientes podemos utilizar tiras dentífricas o barritas para que el perro las muerda. Estas tiras o barritas nunca deben sustituir a un buen cepillado sino que deben ser un complemento a la higiene bucal. Está demostrado que cepillar los dientes de nuestra mascota una sola vez a la semana no es eficaz para prevenir la gingivitis. Existen muchos productos para la higiene bucal pero, como ya he comentado, ninguno debe sustituir al cepillado.

Al eliminar la placa estamos previniendo la aparición de gingivitis. No podemos saber qué individuos con gingivitis van a desarrollar periodontitis, pues se deben dar los factores explicados anteriormente. Pero sí está claro que aquellos que tienen las encías sanas no la desarrollarán. Por lo tanto, el objetivo debe ser prevenir y evitar la gingivitis.

Generalmente, los perros y gatos con problemas bucales pueden tener dolor y estar afectados de estrés por esta situación, muchos de ellos están poco activos y solemos achacar a la edad. Son muchos los que después del tratamiento mejoran su actitud, están más activos y muestran más alegría, lo cual demuestra lo mucho que les afectaban los problemas de la boca.

Examinar regularmente la boca de nuestra mascota y realizar un cuidado preventivo de la misma evitará que las enfermedades relacionadas con ella alcancen un estado tan avanzado que provoque en el animal molestias y dolor. En muchas ocasiones, estos procesos son irreversibles y conllevan la pérdida de dientes, con la consiguiente dificultad para masticar los alimentos.

Mantener una boca sana es muy importante para la salud general y el bienestar de nuestras mascotas. La relación entre la calidad de vida de nuestras mascotas y el tiempo invertido en la salud de su boca no tiene precio.